Alejandro Caspe cuenta con una experiencia de 30 años en la fotografía erótica y retrato. Él es más que un fotógrafo, es un artista que confronta la realidad con imágenes sensuales y que aborda los temas más incómodos con una naturalidad casi insultante, sin perder de vista jamás el sentido artístico.
Estoy gordo y ya no tengo edad para tomarme fotos y seguimos con los prejuicios.
Mi trabajo más icónico a lo largo de 26 años de carrera de 30 que tengo. Este trabajo comprende del año 1992 al 2017.
Que importa si un desnudo es justificado o no, lo que importa es soltar los tabúes.